El diputado del PP Rafael Maluenda ha tenido que esforzarse hoy a fondo para reunir al número justo de parlamentarios de su grupo para rechazar una propuesta socialista. Transcurría el debate de la propuesta en la que el Grupo Socialista reclamaba al presidente de la Generalitat que recibiera a la asociación de afectados por el accidente de la línea 1 del metro. A la vista de que durante la discusión de la proposición el número de diputados del PP era inferior al de los de la oposición, Maluenda, que no aguanta medio minuto sentado, organizó rápidamente una ronda de llamadas de móvil para que sus señorías del PP ausentes acudieran a sus escaños. A las órdenes de Maluenda varios diputados se han puesto a realizar llamadas hasta garantizarse el número de votos necesario para rechazar la proposición socialista.
Maluenda no hacía más que contar y recontar, y su nerviosismo aumentaba a cada recuento que no le salían las cuentas. Llegó a ponerse la mano en el corazón acelerado cuando en el último recuento ya le salía la suma. Cuarenta y seis diputados del PP participaron en la votación. Los justos, puesto que aunque en la oposición había tres ausencias, Maluenda no tenía claro que en el último momento aparecieran por la puerta del hemiciclo y la oposición sumara cuarente y cinco votos.
A toto ello, no se puede calificar más que de reprobable el hecho de que durante la defensa de la proposición que hizo para el PSPV la portavoz adjunta Carmen Ninet, la mayor parte de los representantes del PP estuvieran ausentes. Otro desprecio.
foto: levante-emv
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